Crónica de una Cincomarzada sin viento

Ayer, día 5 de marzo, la CNT zaragozana participó en la jornada festiva y cultural que supone la Cincomarzada, montando como todos los años un puesto donde se podían encontrar libros, camisetas, pegatinas, panfletos, propaganda, etc, esta vez en el Parque de Oriente, junto con otros colectivos sociales.

El tenderete cenetista estuvo presente en el parque desde primeras horas de la mañana hasta el momento en que empezó a anochecer, y se aprovechó todo el día para informar a todxs lxs curiosxs que se acercaban sobre de las diversas luchas que mantiene la anarcosindical (Mercadona, la marcha contra la Macrocárcel de Zuera, la campaña contra la Expo 2008, la lucha contra la instalación de una base de la OTAN, etc). Esta labor informativa parece que dio sus frutos, puesto que el parque acabó lleno de pegatinas antiExpo y antiOTAN (además de que la Federación de Barrios, responsable de la organización de la jornada, había elejido como lema para este año “Zaragoza, ciudad de paz”, con el ánimo de mostrar la oposición del tejido social zaragozano a la instalación de una base de OTAN en nuestra ciudad) y se sacaron algunos euros para la caja de resistencia de Mercadona. Respecto a esto último, queremos destacar una vez más la sorpresa que se lleva la gente cuando descubre la cara oculta de Mercadona, y el hecho de que muchas de estas personas nos aseguraron que no volverán a comprar ahí.

También se aprovechó el día para vender libros, la mayoría de ellos relacionados de alguna manera con el Movimiento Libertario, y para repartir de manera gratuita toda la prensa anarquista y anarcosindicalista que fuimos capaces, de modo que todxs lxs compañerxs quedamos bastante satisfechos por la labor de difusión realizada al final del día.

Aparte de todo esto, también hubo lugar para el humor, de modo que colgamos en nuestro tenderete un par de "ladrillos" de cartón en protesta contra la salvaje especulación urbanística que estamos presenciando no sólo en Zaragoza sino en todo el Estado. Además, nos llamó la atención un grupo de personas que estaban repartiendo octavillas contra la Expo en presencia de un Fluvi con la cabeza convertida en ladrillo…será porque la Expo no nos va a traer otra cosa más que ruina, casas más caras y un río más fastidiado por la mano del hombre.

En conclusión, fue un día en el que se respiró un buen rato anarquía y libertad, fue una jornada de fiesta y de lucha…y esta vez el cierzo nos dejó en paz, a diferencia del año pasado, que todo el parque tuvo que ser desalojado por culpa del viento.