Durante este segundo día el seguimiento de la huelga se ha incrementado, los piquetes han contado con aún más gente y los autobuses llegaban medio vacíos. El paro está siendo un rotundo éxito, secundado en estos momentos más del 85% de la plantilla.
La producción de Litera Meat comienza a colapsar, esta madrugada hemos observado cómo han acudido al matadero camiones vacíos para retirar cerdos, síntoma inequívoco de que el seguimiento de la huelga es masivo. Y ello, a pesar de las constantes presiones que la plantilla está sufriendo por parte de la empresa para tratar de mermar en vano la huelga de CNT, único sindicato con implantación real en la empresa como el paro demuestra.
Queremos denunciar públicamente que, al igual que en el día de ayer, Litera Meat ha prohibido la entrada en las instalaciones al Comité de Huelga, siempre acompañado de una patrulla de la Guardia Civil.
Imposibilitando el acceso del Comité de Huelga a las instalaciones, Litera Meat está vulnerando lo dispuesto en el art. 7 del Real Decreto-Ley 17/1977, de 4 de marzo, así como la doctrina al respecto del Tribunal Constitucional recogida en sentencia de 8 de abril de 1.981, ambos esenciales para poder poner en práctica un derecho fundamental básico, como es el derecho a huelga, que la Constitución Española recoge en su artículo 28.
Es derecho y deber del Comité de Huelga acceder a las instalaciones de la empresa para comprobar si existe esquirolaje, es decir, la práctica prohibida de contratar nuevos trabajadores para sustituir a los huelguistas y tipificada como falta muy grave en el 8.10 del texto refundido de la Ley de infracciones y sanciones en el orden social. A día de hoy, el Comité de Huelga cuenta con fuertes indicios de la existencia de esquirolaje externo en el matadero, que de momento son eso indicios, puesto que no nos han dejado comprobar ni documentar.
Asimismo, también nos han llegado informaciones que no podemos comprobar, ni por lo tanto en esto momento aseverar, a cerca de la existencia de otra práctica prohibida y lesiva como es el esquirolaje interno, es decir, la sustitución de las personas en huelga por trabajadores de la misma empresa con el fin de minimizar el efecto de la huelga. Según la Doctrina del Tribunal Supremo la sustitución interna de huelguistas durante la medida de conflicto constituye un ejercicio abusivo del ius variandi empresarial, ya que, en tal caso, quedara anulada o aminorada la presión ejercida legítimamente por los huelguistas a través de la paralización del trabajo.
Se espera un seguimiento igual o superior en el tercer día de huelga, los trabajadores siguen con la moral alta y convencidos de luchar para conquistar sus derechos laborales.