La empresa de Juan Roig ha reconocido en un acto de conciliación el «perjuicio ocasionado» a la trabajadora del Mercadona de Utebo, aceptando la extinción de la relación laboral y el pago de una cuantiosa indemnización después de que CNT Zaragoza iniciara el proceso judicial señalando graves vulneraciones.
La trabajadora venía sufriendo desde hacía años un menosprecio constante de su integridad moral por parte de su superior. Tal hostigamiento incluía comentarios vejatorios y presiones continuas, todo ello en situaciones de salud física que desde CNT entendemos extremadamente delicadas.
Este comportamiento provocó en la trabajadora graves crisis de ansiedad y la llevó a una larga baja médica por razones de salud mental. Pero lejos de activar un protocolo real para proteger a la víctima, Mercadona agravó la situación: durante la baja médica de la trabajadora, la empresa vulneró su intimidad al vaciar su taquilla personal y dejar sus pertenencias a la vista de toda la plantilla, un hecho que la propia Inspección de Trabajo determinó como una vulneración de sus derechos fundamentales.
Como represalia final – tras la denuncia de la trabajadora – la empresa la trasladó forzosamente de su centro de trabajo en Utebo a la tienda de Alagón a sabiendas de que no disponía de carnet de conducir y se situaba lejos de su residencia.
Ante la gravedad de los hechos, CNT interpuso la correspondiente demanda de tutela de derechos fundamentales y una solicitud de extinción indemnizada del contrato. Mercadona admitió en el acto de conciliación el perjuicio causado y pactó un acuerdo económico con la trabajadora, sin llegar a juicio.
Desde CNT Zaragoza celebramos esta victoria, que pone fin a una situación intolerable de abuso de poder, y animamos a todas las trabajadoras y trabajadores de Mercadona a defender sus derechos y dignidad a través de nuestro Sindicato.
¡La lucha es el único camino!
Cuenta con CNT.



