Cuando a un parad@ se le ha agotado la prestación por desempleo y el subsidio (si es que por edad y cargas familiares cumplía los requisitos para cobrarlo) le queda recurrir a lo que en la Asistencia Social se llaman Rentas “de inserción”, en Aragón se llama Ingreso Aragonés de Inserción (IAI) .
Esta ayuda se concede únicamente a gente que demuestra no tener ingresos y se traduce en unos 400 euros al mes que pueden subir hasta 600 cuando hay hijos a cargo y un alquiler o hipoteca que pagar. Dura un año “revisable”.
Esta ayuda no es un Derecho, sino que tienes que solicitarla en los Servicios Sociales que valorarán si te la conceden o no utilizando criterios tan variopintos como que “hay gente peor que tú”, “por lo menos tienes casa”, “no tienes hijos”, “no se te ve tan mal, llevas el pelo arreglado” o “no te lo tomes tan a pecho y ya veremos en seis meses”… Eso pasa así, todos los días del año en cualquier Centro Municipal de Servicios Sociales.Son excusas, cada vez más humillantes para el que las pide, que se dan porque no hay presupuesto suficiente para todos los que cumplimos los requisitos (no tenemos otro medio de vida). Somos legión y vamos creciendo a cada empresa que cierra, a cada contrato que se acaba, a cada prestación que termina… y, también , consecuencia de tanto “empresario honrado” que no te reconoce la categoría, que te manda al paro seis meses para volverte a contratar, que exige trabajar en negro “hasta que entre la subvención” o cotizar la mitad de las horas que trabajabas si pretendes pasar el periodo de prueba (de un año desde la nueva reforma laboral) o que te vuelva a llamar.
Con más de 100.000 parados en Aragón cada vez somos más las personas que, habiendo agotado todas las prestaciones y habiendo sido expulsados del Mercado de Trabajo por una crisis-estafa de la que no somos responsables ni beneficiarios, no tenemos más medio de vida que solicitar una limosna en los Servicios Sociales. Y decimos limosna porque eso es lo que es. El IAI se da (si te lo quieren dar porque no se puede exigir) a cambio del consecuente “tome, pero no se lo gaste en vino” solo que, en este caso, en lugar de darlo una beata a la puerta de una iglesia te lo da un funcionario que te hacer firmar un “Acuerdo de Inserción”.
El “Acuerdo de Inserción” que te hacen firmar es de traca. Consiste paradójicamente en que te “comprometes a buscar trabajo”, así que toca volver a hacer el vía crucis, otro más, por polígonos industriales, bares, comercios y demás empresas que (lógicamente, porque no hay trabajo) se niegan a cogerte el curriculum, pero a los que esta vez tienes que pedir que, al menos, te sellen en un papel que has intentado entregarlo, no sea que, además de la dignidad, te quiten también la ayuda.
Ante esta situación, desde la CNT exigimos:
– Transparencia en la concesión de las Ayudas Sociales: Que los criterios de concesión, renovación y denegación sean públicos. No aceptamos que siga dependiendo de que “le entres por el ojo” al Asistente Social de turno.
– Que se aclare, expediente por expediente y por escrito, si la denegación o el retraso viene desde el CMSS (dependiente del Ayuntamiento) o del IASS (dependiente de la DGA). Que dejen de pasarse la pelota en la prensa con fines partidistas, porque todos los partidos con representación en el Ayuntamiento y la DGA son los responsables y están mintiendo a los usuarios.
– Que, en cumplimiento de la Ley de Protección de Datos de Carácter Personal cualquier usuario de los Servicios Sociales tenga en todo momento derecho de acceso a su Expediente (como ocurre con las Historias Clínicas en Sanidad o en el SEPE, por ejemplo) incluyendo las anotaciones que se hagan en él .Que dejen de negarse a darte copia sellada de la documentación que entregas en fecha. Lo que están haciendo actualmente, además de injusto, es ilegal.
– Que desaparezca el Silencio Administrativo en materia de Situaciones de Emergencia Social. Es decir, que, cuando se presenta una solicitud, la “no contestación” no suponga que te la deniegan por la cara sino que estén obligados a razonar por escrito por qué la deniegan y, si no lo hacen, estén obligados a concederla.
Son cosas muy sencillas, de hecho, salvo en el último punto, sólo estamos exigiendo que se cumpla la legalidad vigente, a la que, por lo que vemos, no tenemos derecho la gente que “hemos agotado las prestaciones”.
Si, como se excusan, el problema es que no hay presupuesto suficiente para todas las ayudas, pueden empezar por hacerles levantar el culo (ni el papa tarda tanto en darte audiencia) a los Inspectores de Trabajo para que investiguen a los empresarios que coaccionan a sus trabajadores para que no coticen por el trabajo que realizan. Si no saben por donde empezar, que lo dudamos a horrores, desde CNT podemos aportar una larga lista de empresas. Y pueden seguir por retirar todas las subvenciones a los sindicatos, partidos políticos, asociaciones patronales, iglesia … y que todo ese dinero (público, que pagamos cada vez que compramos una mísera barra de pan) se revierta en la gente que realmente lo necesita
Desde la CNT llamamos a toda la clase trabajadora a organizarse independientemente de que tenga trabajo o no. Somos conscientes que las injusticias que estamos viviendo los compañeros que solicitamos el IAI son las mismas que sufrirán los demás cuando se les acabe el trabajo o el paro, de la misma manera que la lucha contra las injusticias a las que se enfrentan los trabajadores en sus empresas nos afectan a nosotros cuando vamos a buscar trabajo.
No dejes que te hundan en la miseria, exige lo que es tuyo. Contra el paro: dignidad y orgullo
Organizate y lucha