Cara de voluntario. Dicho sea con perdón hacia esos pobres que se estarán cociendo al sol para que los “obligaos” se forren un poco más a su costa.
Pues eso, ahora resulta que el Ayuntamiento ha repartido 350 entradas por barba a sus 31 concejales, que la Alcaldía reparte directamente otras 1.000, que la DGA reparte nada menos que 35.000, y que se han entregado nada más que 200.000 a las empresas accionistas o que han trabajado en la Expo. Todas por el morro, para que las repartan a su gusto, por sus “compromisos sociales”. Por 35 euros cada entrada, son unas perras…
Así que a los que han comprado su entradica pagando a toca teja…
La cosa es que mogollón de gente va a pasar por el morro. Pero ya se dice que podrá haber más. Si la peña no va más que por la noche, porque allí no se puede estar al sol, acabarán regalando las entradas para que los negocios no sean una ruina.
Políticos de la Expo. Todos los partidos políticos han contribuido al unánime consenso del Expo-Timo, todos la han apoyado para que no quedara duda de que era una cosa de todos: un sueño popular, una oportunidad sin par, todos chuntos y, más que unidos unánimes. Todos querían sacar provecho, electoral y del otro, del posible éxito del asunto.
Pero los políticos siempre quieren más. También quieren sacar provecho de los fracasos. Los hemos visto en la tele (¿dónde si no?) diciendo que quieren ayudar al “desarrollo”. Pero ya empiezan a señalar los errores de la Expo y sus aledaños: que si se ha llegado tarde, que si falta esto, lo otro, que si los desfases presupuestarios…
Así son ellos: ya están como aves carroñeras sobrevolando para lanzarse sobre la presa cuando la peste es ya insoportable. ¿Pero es que no se olía a podrido desde el principio?
Total, que empezarán a hablar de “la gestión”, que la “idea” era buena pero que la gestión de los socialistas ha sido malisima… Luego, con el fracaso total, con la ruina económica, empezarán a pedir “responsabilidades políticas” y dimisiones, que es lo que les gusta para ponerse ellos. Y al final acabarán todos juntos echándole la culpa a algún pobre –es un decir- arquitecto, ingeniero o funcionario municipal. La culpa es de alguno, de la gestión, no del sistema. Y a correr.
Pero quien se lleva la palma en esto del oportunismo político son los comunistas. Con IU se han sumado y aplaudido el consenso unánime, mientras con la boca pequeña ponían algún “pero” para estar con Dios y con el diablo. Y luego sí, con la boca del PCA, se sueltan y ponen a la Expo a parir.
Pero también muy curiosamente: sacan un largo comunicado hablando de la especulación urbanística, del insostenible crecimiento de la ciudad hacia el extrarradio aunque tienen mucho cuidado en no dar nombres… ¿Pero es que en ese partido de Aragón no hay nadie de Zaragoza que haya oído hablar de Arcosur? Todos en Zaragoza saben qué es Arcosur, esa macrourbanización de 21.000 viviendas entre Montecanal y la Feria de Muestras, la mayor operación especulativa nunca vista por estos pagos, en la que están metidos Ibercaja y todos los grandes promotores de la ciudad. Y todos saben que Arcosur adelantó la pasta para comprar el meandro de Ranillas a cambio de que les dieran vía libre a su insostenible mega proyecto, y a cambio de unos miles de viviendas de protección que eran del ayuntamiento y ahora las venderán ellos como libres. Pues bien, estos del PCA ni lo mencionan.
Naturalmente, también sabemos que las cooperativas de viviendas que patrocina el PCA (o que le patrocinan a él, ya no se sabe quién es “la madre” en esto) también están en el negocio y construirán viviendas “sociales” en Arcosur. Así que fácil se explica que hayan olvidado mencionar esa palabra: Arcosur.
Aviso: cualquier día de estos iremos a ver la Expo. Ya hemos encontrado por ande colarnos, así que ya no hablaremos de oídas ni leídas, ni de lejos, sino de lo que veremos con nuestros propios ojos de cerca. Se puén preparar…